Niños y mascotas: beneficios que aportan las mascotas en los niños

Todos los que amamos a los perros y a los gatos disfrutamos de los beneficios que estos pequeños amigos pueden aportarnos. Es sabido que el vínculo que se genera entre los niños y las mascotas es sumamente enriquecedor, las mascotas pueden ayudar a los infantes a desarrollar empatía y preocupación por los demás.

Beneficios de mascotas en niños

Existen numerosas investigaciones que demuestran que los niños que desarrollan un vínculo fuerte con una mascota son más empáticos  y son socialmente más hábiles que los niños que no tienen mascotas.

La relación que desarrollan  los niños con animales actúa como estabilizadora de la conducta infantil, contribuye a fomentar la alegría, a eliminar la tristeza y a disminuir los miedos normales de la infancia.

Mascotas y niños: beneficios

Los gatos y los perros son grandes facilitadores sociales. Una mascota puede ser conector entre un niño con menor capacidad de sociabilizar  y otros compañeros de juego potenciales.

Las mascotas ayudan a desarrollar el concepto de responsabilidad en los niños, el mejor momento para incorporar una mascota a la vida familiar es alrededor de los cuatro años del niño. Los niños a esta edad, con la ayuda de sus padres, desarrollan fácilmente el sentido del compromiso que significa adquirir una mascota.

Los niños junto a sus padres, rápidamente comprende y toman responsabilidad con los cuidados de un cachorro, comprenden y hacen cumplir las rutinas de alimentación y salud de los animales de compañía.

Los perros y los gatos brindan una oportunidad de juego,  los niños que conviven con mascotas muchas veces prefieren interactuar con ellos antes que tener otro tipo de actividad menos enriquecedora.

Las mascotas y los niños pequeños

Los niños pequeños y los hijos únicos generan un vínculo más fuerte con las mascotas. Esto sugiere que los perros y los gatos pueden ser particularmente importantes para ellos.

Frente a situaciones angustiantes, muchos niños pequeños recurren a su mascota ya que estos son considerados sus confidentes.

Los niños recurren a su mascota para abrazarlo y encontrar alivio en situaciones angustiantes. Los animales de compañía con frecuencia son más importantes que algunas relaciones humanas.

Los perros y los gatos pueden facilitar la adquisición del lenguaje y mejorar las habilidades verbales en los niños. Las mascotas actúan como  receptores del balbuceo del niño. Además, la mascota también puede servir como tema de conversaciones que estimulan la construcción del vocabulario.

Otro de los efectos positivos que ejercen las mascotas en su interacción con los niños es la estimulación del desarrollo cognitivo. El juego libre e imaginativo con animales de compañía genera una fuente de creatividad para resolver problemas

 

Mascotas en el colegio

La inclusión de perros en las aulas de colegios genera  una gran variedad de beneficios educativos.

Mejoras en tareas de habilidades cognitivas y motoras, un mayor cumplimiento de las instrucciones son solo algunos de los cambios que se observaron en aulas con inclusión de perros como soporte.

Se pudo notar que cuando un perro está en el aula, hay menos problemas de comportamiento, aumentan las conductas positivas, se logran mejoras en la comunicación, y se incrementa el nivel de atención hacia el maestro.

Existen programas de alfabetización para niños asistida con animales. Se observan mejores puntajes de comprensión de lectura que en programas de lectura sin los perros. Los niños que leen a los perros también mantienen obtienen mejoras a través del tiempo.

Niños trastornos del espectro autista y animales

Mascotas para niños autistas

Los niños con trastornos del espectro autista (TEA) y algunos animales crean un vínculo de manera paulatina, surge una relación natural, es un vínculo donde la comunicación va más allá de lo verbal.

Un estudio que evaluó el estrés en los cuidadores de niños con TEA, antes, durante y después de la adquisición de un perro, demostró un descenso del estrés en el niño y en los demás miembros del grupo familiar al estar en contacto con la mascota en sus hogares.

El estudio postuló que la reducción del estrés podría justificarse por cambios en las rutinas y salidas al aire libre, además de la puesta del foco de atención en el nuevo integrante de la familia.

Este hallazgo es muy significativo, ya que los niveles altos de estrés en los cuidadores de niños con  TEA pueden afectar negativamente los resultados terapéuticos.

Los niños con TEA  no suelen percibir a los animales de asistencia  como invasores del espacio personal.  Por lo tanto no se sienten intimidados, la relación se genera con naturalidad.

Terapia con animales para niños autistas

El trabajo de los profesionales junto a los animales suele dar resultados superiores a los logrados con otro tipos de terapias. Los niños que hablan muy poco comienzan a  llamar por su nombre al perro o a darle órdenes sencillas.

Los animales logran aumentar su sensación de confianza, la empatía y abrir comunicación entre los terapeutas y los niños con trastornos del espectro autista.

En estudios que se desarrollaron en torno al vínculo de los niños con TEA y animales se pudo observar el estímulo de múltiples funciones sensoriales y el aumento de las interacciones sociales en estos niños.